lunes, 30 de septiembre de 2013

¿Manipulan los medios de comunicación?

¡Pues vaya pregunta! Entremos en materia:

Me ha llamado la atención el tratamiento que han dado los medios de comunicación a las últimas elecciones en Alemania y a sus resultados. Y no sólo en España. También el diario Der Spiegel daba las informaciones en la misma dirección que los medios españoles.

¿Y qué es lo que ha sucedido en las elecciones alemanas? Bien, con claridad el electorado se ha inclinado más hacia los partidos de la derecha que en las elecciones anteriores. Apenas leo de vez en cuando los artículos en inglés del diario Spiegel, por lo que no soy un gran experto. Tampoco tengo los datos de participación electoral y los datos de votos brutos a cada partido y segmentados por regiones, edad, clase social, etc. es imposible hacer un análisis medianamente profundo de las elecciones sin tener esos datos.

El gráfico que veis algo más abajo lo he tomado del Spiegel, y nos da una idea de qué ha pasado. Nos dice cómo han cambiado los votos.

Llama poderosamente la atención de dónde ha sacado el partido, llamémoslo semi-nazi, AfD (Alternativa para Alemania, euroescéptico) sus votos. Y...¡coño! ¡El partido proporcionalmente más tocado ha sido Die Linke, o sea, La Izquierda!

Evidentemente, y como se intuía por los resultados de escaños, el partido de Merkel se ha comido a su socio, el Partido Liberal. y ha obtenido votos de gente que se abstuvo, e incluso una buena parte de los votos que han perdido los Verdes. Para más inri, apenas ha perdido votos que hayan ido hacia AfD, un partido que es, teóricamente, de derechas. Ése es el éxito de Merkel. 

 This graphic shows migrating voter trends. The single most significant trend...
Me atrevo a lanzarme a la piscina y ofreceros mi intuición sobre lo ocurrido. Angela Merkel ha vendido sobre todo dos ideas con mucha fuerza irracional (que es el tipo de populismo que suele vender la derecha):


1- Alemania es quien manda en Europa y ejerce su poder sobre los demás.

2- La señora Merkel ha defendido adecuadamente los derechos de los alemanes enfrentándose y manteniendo a raya a los países vagos y chupópteros del Club Med (más Irlanda).

3- Las elecciones se ganan también desmoralizando al contrario. La propaganda inversa o ingeniería electoral, como queráis definirlo, ha funcionado relativamente bien: Se ha conseguido hundir a Los Verdes y a La Izquierda. Sería interesante saber cuál ha sido la estrategia.

Pues entonces, si los alemanes han votada a la derecha... ¿a qué santo es necesaria la manipulación? Pues sí, los alemanes han votado a la derecha...., pero ha ganado la izquierda. Por una vez y sin que sirva de precedente el sistema electoral ha beneficiado a la izquierda. ¿Por qué? Pues porque dos partidos de derecha, AfD y FDP, no han alcanzado sus últimos objetivos: no han llegado a la barrera del 5% y se han quedado sin representación.

No soy el  único en haber detectado esa manipulación, pero los conaisseurs que me acompañan están, como siempre, escondidos. No se les oye mucho. No es casualidad que mi admirado Emili Piera sea uno de ellos. Sabe leer, no se la cuelan con facilidad.

La manipulación ha consistido en esto:


1-     Se ha dado una importancia "desmedida" a las elecciones alemanas. Por "desmedida" quiero decir que por encima de lo que es habitual. Tengo la sospecha que era para exagerar el "triunfo de la derecha". Incluso pensaban que podía ganar por mayoría absoluta.

2-     El titular unísono ha sido: "Merkel arrasa". Ha aparecido en casi todos los medios, inclusive de izquierdas. Y si digo "de izquierdas" ya no me refiero ya a El País, que éste ya lo doy por descontado. Como ya hemos dicho, el éxito fundamental de Merkel ha consistido en comerse a otro partido de derechas. O de centro-derecha.

3-     Se han escamoteado sistemáticamente los gráficos que aparecen en los medios en todas las elecciones. O sea: Cómo estaba el parlamento antes y cómo queda ahora. En lugar de ellos se han ofrecido los gráficos de los porcentajes de votos de antes y ahora, para remarcar "la idea" que se quiere vender: Merkel arrasa.


Es evidente que si la derecha va a gobernar es porque el SPD (y no sé si los Verdes también) no quieren pactar con Die Linke de ninguna de las maneras. Die Linke ha planteado una serie de líneas rojas para cualquier pacto de gobierno. Están publicadas. Puede que haya alguna que no sea asumida por el SPD. Pero dudo que el SPD haya indicado con claridad "éste y éste otro son los compromisos que me obliga Die Linke y que no puedo cumplir". Y que se haya debatido sobre ellos. Es posible que los argumentos del SPD sean sensatos y que Die Linke cediera en algún caso.

Contrasta la atención de las elecciones alemanas con la casi nula atención que han recibido las elecciones municipales portuguesas. En la prensa de la derecha esta noticia es de las que hay que buscar: no está en las portadas (las de la prensa digital, que son portadas con más de 30 noticias). En las TV "de izquierdas" la noticia se da, aunque más bien hacia el final.

Y también es curioso el caso de las masivas manifestaciones en las Islas Baleares. Los manifestantes han sido inteligentes: han contado con matemáticos que han realizado una estimación científica del número de participantes. Si no fuera por eso os podéis imaginar que se hubiera dividido por 3 la mejor de las estimaciones. Es igual. En El País se da a entender que los manifestantes están en contra de la enseñanza "en inglés". Así no harán amigos. Aderécese con un toque de "independentismo" por su defensa del catalán (¿alguien piensa que una ley que emana de un gobierno pepero no intenta ningunear al catalán en la escuela?) y ya tenemos que una noticia negativa para el PP se convierte en noticia positiva.

En sentido contrario hay dos noticias que parecen contradecir la manipulación:


1-     En La Sexta y otras cadenas de "izquierdosos" se cuestiona la propaganda del Gobierno de España de que ya estamos en la recuperación. No es que no quisieran manipular. Hace unas semanas lo intentaron. Pero es que es una noticia infumable. Se habrán dado cuenta de que es invendible en ciertos ambientes, porque tontos no son los del establishment. En todo caso la gota malaya va haciendo camino, al menos en los que menos sufren la crisis (que existen) y en los más propensos a esa propaganda. Tened la seguridad de que el PP algo va a recuperar en las encuestas de intención de voto. El problema (para ellos) de esa propaganda es que están al albur de acontecimientos internacionales que no controlan. El batacazo en ese caso sería de órdago y sin posibilidad de recuperación. El PP tuvo un día el activo de la no-corrupción. Lo perdieron completamente, hace ya años, pero sobre todo estos últimos años. El de la "buena gestión económica" lo están perdiendo, pero aún podrían recuperarlo, con suerte (para ellos, y desgracia para nosotros).

2-     Me han sorprendido las declaraciones de la Sra. Esperanza Aguirre sobre el problema catalán. Un ejemplo de cómo actuar en la buena dirección. Y una contradicción flagrante con lo que ha sido su comportamiento durante su anterior carrera política. Y con lo que mandan los manuales de ganar votos (salvo que ella vea lo que yo no veo). No entiendo la jugada, salvo que sea un primer gesto "para el deshielo". Artur (léase Artúr, con acento en la u) Mas, el President catalán también ha realizado algún pequeño gesto. Estoy ansioso por saber cómo se manipulan las masas para que se dirijan hacia la reconciliación, después de años de hacer lo contrario. Si es eso lo que se quiere.


Los casos comentados son unas pequeñas gotas en el océano de manipulaciones que pululan por todos los medios de comunicación. Para terminar os cuento una anécdota que le ha sucedido a mi mujer hoy mismo comprando en una tienda. Alguien le ha hecho el comentario de que "los moros" disfrutan de muchas "subvenciones" y "ventajas". Por suerte está bien adoctrinada por mí, pues la pobre me tiene que aguantar más de un discurso y algún mal rollo que me entra escuchando ciertas noticias. Les contestó que no se equivocaran, que no son los "moros" los que nos han dejado como estamos.

En efecto. Problema de matemáticas: ¿Cuántos “moros” hay que juntar para que la suma de sus "subvenciones" lleguen a igualar lo que nos ha robado Luis Bárcenas? Y quien dice Bárcenas dice tantos otros, algunos mucho peores. Este pequeño argumento creo que es suficientemente contundente como para que nadie cayera en las redes de los partidos de extrema derecha.

El problema es que este argumento se escucha en voz muy baja, acallado por los argumentos que invitan a la irracionalidad que nos venden la inmensa mayoría de los medios de comunicación. Por eso aparece Amanecer Dorado en Grecia (pues se trata de que alguno pique y no vote a Syriza). O lo que hemos visto que ha sucedido en Alemania con el AfD. O en Reino Unido con el UKIP.






jueves, 19 de septiembre de 2013

Al rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos

Majestad:

Acabo de leer un artículo en el diario El País relativo al discurso que Su Alteza pronunció recientemente con motivo de la apertura oficial del curso parlamentario. Entiendo que, muy probablemente no lo ha escrito Vuestra Alteza, sino el Gobierno de Vuestra Majestad. El diario remarca que es un gobierno "de centroizquierda". De todas maneras no parece que haya tenido Su Alteza ninguna objeción en leerlo, a pesar de su impopularidad.

He de reconocerle que, a pesar de que ya debería estar acostumbrado a ese tipo de discursos, me ha afectado bastante la noticia. Tengo la sensación de que mi carácter es parecido al del escritor austriaco Stephan Zweig, quien no acabó de acostumbrarse a los horrores de la II Guerra Mundial. Tan fue así que acabó suicidándose junto a su esposa, y eso que vivía, parece que sano y salvo, en un país neutral. Espero que yo no llegue a tal extremo, como espero que la degradación de la sociedad occidental no retroceda a los niveles de esa época. Aún estamos a tiempo.

Quiero contestar a su discurso de igual forma que un piloto de la fuerza aérea británica contestó a una encuesta que le hicieron sus jefes. Esto sucedió hace no muchos años. En esa encuesta, en una de las cuestiones se preguntaba a los pilotos si estarían dispuestos a ofrecer su vida por su patria. El susodicho piloto contestó más o menos así: "Lo haría, pero sólo después de verle a usted, señor, hacerlo".

Dice Vuestra Majestad que el Estado del Bienestar ya no es sostenible en el Siglo XXI. Estoy de acuerdo con Usted en que el Estado de Bienestar tenga que reformularse, pero no creo que vaya en la dirección que ustedes, los que nos dirigen, quieren. Habrá que volver a analizar desde el origen el sistema impositivo y las prestaciones sociales que se ofrecen. Incluyo en esas "prestaciones sociales" lo que el economista norteamericano Joseph Stiglitz denomina "el estado de bienestar de las empresas". 

Hay que reordenar las prioridades. En estos tiempos, si somos una sociedad verdaderamente solidaria, y no estamos donde impera la ley de la selva (para qué, entonces, querríamos una sociedad), habrá que atender primero a los más necesitados, a costa de los que más tienen. El re-equilibrio económico debe ser hoy la primera prioridad en los países occidentales, pues supone la gran injusticia entre los seres humanos, muy por encima de cualquier otra causa, aunque estas sean también merecedoras de atención. El PIB y la riqueza de su país, todavía en mayor medida que en el mío, dan para que todos vivan muy bien, sin necesidad de llegar al reparto igualitario total que preconiza el comunismo.

Es curioso este comienzo de Siglo XXI, Majestad. Mucho antes de que se me dijera que el Estado del Bienestar es ya una antigualla, hubiera pensado que iban a desaparecer otras "tradiciones". Por ejemplo, que yo le tenga que tratar de Majestad o Vuestra Alteza, no sé, que no estoy muy fuerte en tratamientos. Más bien pensaba que de lo que podríamos haber prescindido es. entre otras cosas, de las monarquías, donde alguien es "elegido" por la G. de Dios, que decimos por aquí, como nos recordaban las monedas hace unas décadas. ¡Caramba, qué viejos aquellos tiempos cuando los ideales de la Revolución Francesa me parecían un adelanto de la Humanidad! Liberté, egalité, fraternité...antiguallas.

Pero no. Aquí las fiestas de los toros son un bien de interés cultural, dignas de protección. Como nuestro ilustre toro alanceado cada año. ¡Viva la Ilustración! Ya puestos propongo recuperar esos festejos de tanta tradición como era esa noble lucha entre el león y el cristiano. Ahí sí que estaban frente a frente de igual a igual.

O quizás podemos volver a celebrar esos torneos de justas que se celebraban entre los Caballeros, montados en su corcel, con la lanza en ristre. Todo se andará, que los caballeros medievales los hemos recuperado ya en este comienzo de siglo, aunque prefieren un juego ridículo con una pelotita y un bastón. Es un juego de escasa tradición aquí, no obstante es más tradicional en la isla de los juegos ridículos, de donde procede.

¡Ah, los Caballeros, los nuevos Señores feudales, hay que protegerlos, como a los toros! Es más tradicional llamarlos así, Caballeros, aunque no monten a caballo, mejor que llamarlos caciques; esta última palabra proviene de una cultura diferente, inferior. Pero, Alteza, permítame un consejo: permanezca alerta; recuerde que en la Edad Media eran a menudo más poderosos que Vuestra Majestad. En cualquier momento le pueden mover el trono. A pesar de que sea asiduo a las reuniones de Bildeberg, cuestión que desconozco.

Viva usted muchos años, pero vean mis ojos el día en el que sus compatriotas puedan dirigirse a usted como a un ciudadano más.


viernes, 6 de septiembre de 2013

Crimen y castigo


El título del famosísimo relato de Dostoievski ha acabado por dar título a este artículo. He dudado sobre él. Por una parte me gusta, es un título con fuerza, con tirón. Asocia el crimen, es decir, la conducta antisocial por excelencia, con su represión, esto es, la defensa que tiene que activar la sociedad para que el criminal no vuelva a recaer en esa conducta y, sobre todo, para disuadir a otros para que no sigan el mismo camino equivocado. Pero en esa obra su protagonista, Raskólnikov, pretende emular a los "grandes personajes", como Napoleón, cuyos crímenes, inmensos, no tienen su castigo (la obra debió escribirse al poco tiempo de su campaña en Rusia). ¿Por qué el crimen individual, realizado por una persona "de a pie", merece castigo, mientras que el crimen contra la humanidad del líder político que organiza una guerra, el saqueo de un país con miles de asesinatos, merece una estatua con su efigie triunfal a caballo?

Voy a escribir algunas líneas sobre el relativamente reciente accidente de tren en las cercanías de Santiago de Compostela. La redacción estaba casi terminada cuando me voy de vacaciones y lo retomo ya en septiembre. Mientras tanto, el juez, acertadamente, ha tomado ya decisiones que van en la línea de lo que tenía preparado.

Como decía, el título me parecía, en ese sentido, poco apropiado, porque es excesivo. Es evidente que no hay conductas dolosas con resultado de muerte, aunque veremos que hay conductas que voy a calificar de criminales, pues son malignas, torticeras, que designan a quienes las tienen como seres faltos de todo principio ético. Añado que estos malvados no tendrán castigo. Lo único que puedo hacer es denunciarlos.

Ese sentido de dualidad se presenta entre el desgraciado maquinista del Alvia, que sin duda será castigado (y no estoy diciendo que no lo merezca, aunque su mayor castigo se lo infligirá su propia consciencia, y dicha sentencia interna será mucho más dura de la que merece), y otros responsables que podrían salir indemnes (y tampoco quiero condenar a nadie que no lo merezca, para ello hay que tener todos los datos encima de la mesa, y eso sólo el juez los puede tener, si los llega a tener). Gracias al juez los responsables técnicos por lo menos van a tener que explicarse muy bien si se quieren ir de rositas. Los "malignos" que he citado son otros, no tienen responsabilidad directa en el accidente.

¡Qué lejos está el periodismo actual de esa gran película sobre los periodistas que muchos recordaréis, "Primera Plana"!. Si Billly Wilder tuviera ahora los años que tenía entonces, estoy seguro de que no haría esa película como una comedia, sino como una tragedia griega, pues a ese nivel están ahora los medios de comunicación. Se me podrá decir que "siempre han sido así". De hecho, recuerdo un profesor de bachillerato (o de COU, no estoy seguro) que ya nos prevenía por entonces. Nos indicaba: "Cuando voy al kiosco a por el diario le digo al kiosquero: deme, por favor, 5 duros de mentiras".

Sí, pero no. Siempre ha habido presiones, manipulaciones, periodistas o dueños de diarios que se venden, etc. Pero había periodistas que siempre ponían algún límite. Y la dirección de la Historia era, en todo caso, de mala a menos mala, caminábamos en el buen sentido. Hoy, eso, simplemente ya no existe: los diarios se dedican a un juego manipulador perfectamente planificado. Hace años dimos media vuelta y ahora vamos de malísimo a todavía peor. No sé por qué sólo somos una minoría los que vemos lo que sucede. La mayoría parece un dócil rebaño camino del matadero.

Volviendo al tema del accidente, ha aparecido una noticia que confirma lo que suponía: RENFE va a incrementar los sistemas de seguridad, en especial en ciertos tramos de transición de la Alta Velocidad a la red Convencional. ¡Si estaba claro que había un defecto en las medidas de seguridad! No seré yo quien diga si esto tiene o merece tener relevancia penal, pero se debería haber aprendido del accidente del Metro de  Valencia, porque lo sucedido en Santiago de Compostela es básicamente idéntico. El esquema en ambos casos fue;

  • Una curva peligrosa tras un tramo recto donde se puede correr + Un maquinista que se despista + Ausencia de controles automáticos = Un accidente con un montón de muertos.

¿Es un problema de proyecto de la línea? ¿O las deficiencias de seguridad se han dado con una decisión de explotación de la línea? Aquí estoy ya muy lejos de poder discernir, pues habría que conocer la respuesta a muchas preguntas ¿Cómo se planifica la seguridad de la línea durante su construcción, de manera global o por tramos independientes? ¿Cuántos cambios ha sufrido el proyecto? ¿El tren que circulaba es el que estaba previsto en proyecto? ¿O por sus características precisaba adaptar los sistemas de seguridad? ¿El sistema de Calidad recogía bien las incidencias que se producían? ¿Y estas incidencias se produjeron? ¿Y se les dio respuesta adecuada y en tiempo razonable?

La respuestas a dichas preguntas nos ofrecerán al responsable o responsables penales del error. El error es garrafal, visto a posteriori. En efecto, parece que los trenes de Alta Velocidad poseen unos sistemas de seguridad que los hacen funcionar prácticamente sin la ayuda del maquinista, automáticamente. Es lógico, a esas velocidades las percepciones de nuestros sentidos no llegarían a tiempo de manejar correctamente el tren. El problema es que el accidente se produce fuera de un tramo de Alta Velocidad. Pues bien, parece evidente que la última decisión del sistema de seguridad del tramo de Alta Velocidad que se abandona debería consistir en dejar al tren en "condiciones de Baja Velocidad". Por tanto, no debería dejar entrar el tren en una curva a 190 km/h. No parece sensato que las condiciones de Baja Velocidad se suponga que se cumplen por circular por debajo de los 200 km/h. Desde luego que no es correcto en el caso que nos ocupa, donde al final de una zona de Alta Velocidad con una recta de decenas de kilómetros hay una curva cerrada.

Tengo algo de experiencia en proyectos y sé que los proyectos de las grandes infraestructuras tienen muchos controles. Normalmente los cálculos poseen una revisión por una ingeniería diferente. Tengo alguna experiencia en ello. También es cierto que los proyectos de FFCC se desarrollan por tramos, pero desconozco si esa partición afecta a los proyectos de seguridad.

El proyectista que diseñó el sistema de seguridad debe ser un especialista que "visione" todos los riesgos y los reduzca a un mínimo.

Pero en descargo de los técnicos intervinientes hay que decir, y también en ello tengo alguna experiencia, que los errores pueden parecer muy evidentes "a toro pasado", pero no siempre se ven con claridad con anterioridad. En ese sentido es muy importante comparar los "antecedentes". Si hay proyectos con trazados similares (no sólo en España), ¿se actuó igual o en otros muchos casos semejantes se ha actuado correctamente? Esto nos indicaría si lo sucedido es un "error garrafal", imperdonable, o bien nos encontramos ante un error más difícil de descubrir a priori. 

No veo, en principio, a responsables políticos, más allá de los dirigentes de Adif o de RENFE (y solo con responsabilidad política, no penal). aunque sibilinamente se ha apuntado a algunos en los medios (con toda la mala intención, pero el juego político es así). Ni a los políticos actuales, ni a los que había cuando se realizó la construcción. No pueden estar al tanto de esos detalles técnicos, salvo que se inmiscuyeran a propósito, cosa improbable y de la que no tenemos datos. O salvo que se inmiscuyan ahora, por la razón que sea.

Y ahora hablemos un poco de los malvados. Durante los primeros días tras el accidente, los medios de comunicación que escupen habitualmente su bilis de rabia, culparon al maquinista no sé con qué intención. Seguramente con el deseo de "proteger a nuestra industria" de construcción de AVE's por todo el mundo. O queriendo proteger a "los de arriba". Pero quiero hacer notar que despistes tenemos todos. ¿Quién puede poner la mano en el fuego de que no ha cometido una imprudencia al volante en su vida? La suerte que tenemos la mayoría de nosotros es que ese despiste quedó en un susto. Algunos incluso pueden haber cometido esa imprudencia y no haber siquiera tomado conciencia de ella. La diferencia está en que algunos, los menos, tienen ese despiste en el momento más inadecuado. Y muchos han provocado un accidente con su coche y no son señalados como lo ha sido ese maquinista. No son periodistas, son gentuza que nos quieren convertir en monos histéricos. No les dejemos.

Cada vez entiendo más a Cervantes cuando estaba a favor de la censura, y eso que él la justificaba sólo por las tonterías inocentes que se escribían en los libros de caballería. ¡Qué no pensaría ahora! Pero, por desgracia, si se reinstaurara la censura no sería en el sentido que yo apunto. Así que mejor no pedirla, no la caguemos todavía más.